Los senadores –salvo aquellos que viven a menos de 100 kilómetros de CABA- pasan a cobrar cerca de $9 millones desde este mes. Es decir, el equivalente a más de 30 jubilaciones mínimas, que en las últimas horas fue actualizada en $296.481. Esto es luego de que los miembros de la Cámara alta se pusieran de acuerdo para no llevar ninguna propuesta que frene el impacto de las últimas paritarias en sus ingresos, tal cual hicieron en agosto pasado.
Aquel congelamiento duró hasta finales de 2024. Culminado el período de sesiones ordinarias, y ante la falta de reacción por parte de los senadores, la Vicepresidenta firmó una resolución prorrogándolo hasta marzo de este año. Desde entonces, la pelota quedó del lado de los senadores, que prefirieron obviar el tema.
A comienzos de abril, los trabajadores del Congreso –cuyos salarios vienen perdiendo fuertemente contra la inflación- firmaron, junto con las autoridades de ambas Cámaras, un incremento salarial del 1,5% en enero y 1,2% en febrero. En ambos casos, retroactivos.
Ahora bien, a diferencia de Diputados, donde las dietas están a merced de las negociaciones que Martín Menem lleva por lo bajo con los popes de la Cámara baja –y que mantiene ocultas bajo 7 llaves- en el Senado, sus ingresos están atados a las paritarias, explicó el sitio Ámbito.
Es que un año atrás, cuando bajo el lema de la “motosierra” La Libertad Avanza congeló las dietas en ambas Cámaras, los senadores votaron en el recinto (a mano alzada) un nuevo mecanismo de actualización de sus ingresos. De esa manera, se “desentendieron” de las políticas libertarias que no solo implicaban congelarles las dietas a los diputados y senadores. Sino también, en pos de la “austeridad”, los ajustes salariales implicaron una pérdida del 66,59% para los trabajadores del Congreso respecto del 30 de noviembre de 2023.
En aquel momento, los senadores aprobaron la dieta número 13 a modo de “aguinaldo” (del cual no gozaban, y los diputados siguen sin gozar). Pero, además, establecieron un cálculo para determinar sus dietas. En aquella sesión establecieron que cada dieta sea el equivalente a 2.500 módulos. Para el caso de los senadores que viven en el interior del país. Es decir, casi todos, hay que sumarle otros 1.000 módulos por gastos de representación, y otros 500 por desarraigo.
Las remuneraciones de los empleados del Congreso se calculan multiplicando la cantidad de módulos establecidos para cada categoría por el valor de la unidad de módulo. En rigor, lo que se negocia en las paritarias es el monto del módulo. Con las paritarias celebradas a comienzos de abril, ese monto fue elevado a $2.286.
Así las cosas, hasta marzo, los senadores que viven a menos de 100 km de CABA, tuvieron un ingreso bruto de $4.916.982,79. Mientras que el plus rondaba los $2.950.189.
Tras las paritarias que celebraron a comienzos de mes los senadores pasaron a cobrar, desde este mes, $5.715.000 brutos. Además del plus, que se elevó a $3.429.000. Es decir, un total de $9.144.000 (brutos).
Debido a este fuerte salto en los ingresos de los senadores, y que Tucumán tiene como representantes al exgobernador Juan Manzur, Sandra Mendoza y Beatriz Ávila, el presidente Javier Milei, utilizó las redes para insultarlos y exponer su nueva dieta. "Las ratas del senado evitaron congelar su dieta, van a cobrar 9 millones de pesos por mes", posteó el mandatario.