El 99% de las tucumanas sufre acoso callejero
En la Semana Internacional contra el Acoso Callejero, Acción Respeto realiza actividades de concientización a la población. Alarmantes cifras.

Acoso Callejero. Fotografía ilustrativa.
“Acoso callejero es cualquier práctica con connotación sexual, implícita o explícita, que ocurre con unidireccionalidad entre desconocidos en el marco de espacios públicos y provoca malestar en quien lo recibe”. Así lo define el Observatorio contra el Acoso Callejero de Chile.
Del 2 al 8 de abril, semana que coincide con las vacaciones de primavera de Estados Unidos (en la que se detecta un aumento de la problemática en las calles), se conmemora a nivel mundial la Semana contra el Acoso Callejero. En Tucumán, los números son alarmantes.
Según una encuesta efectuada por Acción Respeto Tucumán, de 1681 encuestadas, el 99% dijo haber sido víctima de acoso callejero. Asimismo, el 86% dice recibirlo frecuentemente. Al 96% no le gusta y el mismo porcentaje dice haberse sentido incómoda o intimidada en la calle. En consecuencia, el 91% cambió de vereda o trayecto, el 48% cambió de vestimenta y el 40% le respondió al acosador, mientras que el 30% dice responderle frecuentemente. De esas mujeres, el 78% considera al acoso callejero como una forma de violencia.
Acción Respeto llegó a la provincia en 2014. “Es una organización apartidaria y autogestionada que tiene como fin luchar contra el acoso callejero a través de la concientización de la población y del cambio cultural”, explica Belén César, referente de la agrupación.
“Estamos hace poco más de dos años haciendo campañas. Si bien se siguen escuchando y viendo casos en la calle, las generaciones más jóvenes vienen con otra cabeza, otro lenguaje y otro tipo de pensamiento diferente al de las más grandes”, comenta.
“Visibilizando y desnaturalizando estas violencias más invisibles podemos empezar a prevenir casos de violencia más graves, cuya cara más oscura es el femicidio”, agrega.
¿Qué se considera acoso?
Miradas, silbidos, bocinazos, comentarios con connotación sexual, roces del cuerpo, arrinconamientos, acercamientos intimidantes, persecuciones, susurros, presión de genitales, registros visuales o audiovisuales y masturbaciones en presencia de la víctima. Todo esto, de manera unidireccional.
“Acoso no es piropo. El piropo es un halago en un contexto adecuado, con dos interlocutores válidos y aceptados como tales, con la confianza necesaria y que genera una reacción positiva de quien lo recibe”, explica Belén.
Semana Internacional contra el Acoso Callejero
Este año, Acción Respeto ha decidido trabajar en dos ejes puntuales: “por un lado, interesa ver cómo vive la población de mujeres trans el acoso en la calle. Para ello, fuimos al Centro Educativo Trans a recoger datos que nos resultaron muy llamativos, que comunicaremos cuando elaboremos la información”.
Por otro lado, interesa “revelar el acoso en bares y boliches. El sábado salimos a las 12 (de la noche) a repartir panfletos y es increíble cómo se instaló el debate, sobre todo entre las mujeres, ya que todas somos víctimas de estas circunstancias. Con los hombres es más complicado, ya que no entienden que se trata de una problemática o minimizan la situación diciendo ‘si es solo un piropo’. Para eso nos informamos: para explicarles y responderles, defendiendo adecuadamente nuestra causa”, reflexiona.
Por último, este viernes se realizará en la Plaza Urquiza una intervención audiovisual y artística con una radio abierta. La experiencia se repetirá el próximo miércoles en el MUNT (San Martín 1545). Todas las actividades de Acción Respeto por la Semana contra el Acoso se organizaron junto a la Casa de las Mujeres Norma Nassif.