Top

"Los parlantes gigantes en los autos son una aberración médica": hay sordera precoz en Tucumán

EFEMÉRIDES

Los hábitos de la juventud y la sordera precoz: en el Día Mundial de la Audición, un otorrinolaringólogo explica los daños irreversibles a los cuales nos exponemos actualmente y que se detectan a diario en nuestra provincia.





Cada 3 de marzo, el mundo habla sobre la audición pues es el Día Mundial de la Audición. La intención de este día establecido como fundamental en el calendario de la salud por la OMS, refiere a la necesidad de cuidar y conservar la audición la mayor cantidad de tiempo posible.

Este año, el lema es "Para oír de por vida, ¡escucha con cuidado!" En ese sentido, tomamos la palabra del Dr. en otorrinolaringología Julio Aldonate, quien trabaja en el hospital regional Lamadrid atendiendo pacientes de Monteros, Famaillá, Simoca, y los valles.

La audición es un sentido que está en esta era cada vez más agredido, nosotros los médicos vemos cada vez más problemas. No es una franja especial la afectada, cada patología tiene distintos orígenes, pero lo más importante es la detección temprana. En Argentina hay un programa auditivo en donde a todos los niños por una franja de seguridad ante de los 30 días de nacidos se hacen un estudio importante para detectar algún problema”, contó para Radio Municipal 87.9.

El sentido se vuelve más importante cuando te falta. En la naturaleza no existen lo sonidos agudos, salvo excepciones muy marcadas en la naturaleza, nada natural supera los 80 decibeles. Cuando llegó la industrialización se detectó gracias a los streaming auditivos a los trabajadores, que ellos cuando se jubilaban quedaban con déficit auditivo porque el ambiente laboral en el que se movían a diario tenía sonidos que superaban los 80 decibeles”, explicó.

“Un ruido es como un martillo, como la tortura china, cuando es insignificante pero es de todos los días causa una lesión. Esa lesión se transforma en un trauma acústico. Los hábitos de la juventud hacen que detectemos sordos precoces, porque desde temprana edad los chicos comienzan a escuchar música fuerte, van al boliche siempre, usan auriculares para estudiar, para hacer ejercicio, para vacacionar, para caminar, el auricular es un sonido que está a milímetros del oído y te lastima de a poco, y la perdida acusica que lógicamente la tenemos casi todos con la edad, la estamos detectando entre los 30 y 35 años, y todos se enteran cuando les hacen los exámenes laborales médicos”, reveló, dejando ver así que el deterioro natural que se ve en la tercera edad se adelantó –al menos- unos 30 años.

La lesión del nervio: un problema sin vuelta atrás

“La parte perceptiva del oído hace cambiar el sonido físico por sonido electrónico, el ruido se transforma en señales, va a través de nervios y se interpreta en el cerebro, cuando se lesiona no se recupera. No solamente es problema de audición, sino que es problema de discriminación de sonidos, es decir, escuchan pero  no entienden. Las heridas en los nervios producen ruido, por ejemplo, ese pitido que muchos escuchan de noche cuando quieren dormir… de eso nadie se recupera”, enseñó Aldonate.

“Ya hay leyes laborales en lugares serios como fábricas grandes, en donde se interpreta la señal auditiva como un daño y se cuidan los oídos de los trabajadores, pero no solo el oído, se usa calzado de goma para que el sonido que va por el piso llegue reducido a los huesos, porque el sonido también ingresa por los huesos. Así como el soldador debe usar una máscara, en el oído también hay que cuidarse”, recomendó.

“Muchos los cumplen y otros no, nosotros vemos a diario las secuelas en quienes trabajaron y trabajan en lugares como el ingenio, por ejemplo. La mayoría de los que se jubilaron ahí terminan con trauma acústico irreversible, o al menos así era cuando no había conciencia del daño acústico”.

En otorrinolaringología conviene prevenir que curar. Muchos piensan que quedaron sordos de golpe, se dan cuenta después de la pileta o de la ducha… pero generalmente esa persona ha ido acumulando cerumen, esto es una secreción natural que tiene el oído, todos producimos distintas cantidades pero llega un momento que el conducto auditivo se tapa un 90% y produce sordera… y esto pasa porque no se hacen revisiones. Yo les digo que cada 6 meses se hagan la revisión, que no esperen a estar sordos sino se les va a infectar, les va a doler. Quienes trabajan en ambientes ruidosos deben hacerse un control anual para ver si está todo estabilizado o avanza su deterioro auditivo. Es como en todo, si sos diabético te controlás, no lo llevás solo con la pastilla y listo”, comparó el profesional de la salud.

Los adolescentes y sus hábitos

Desgraciadamente este es un problema generacional, aunque le digas a los chicos lo que va a ocurrir la mayoría no te escucha, con la pandemia se incrementó el uso de auricular pero se mermó el tema del ruido del boliche. Tendría que estar especificada siempre la intensidad que tienen los sonidos que nos rodean, en boliches, festivales y conciertos. Muchísimos músicos están sordos porque practican con los retornos mal ubicados y en espacios pequeños. Una persona que hace viajes prolongados en auto y siempre va con música alta también se daña el oído y la laringe. La prevención es cumplir con cosas sencillas, no permanecer mucho tiempo en lugares donde el sonido supere los 80 decibeles, cuidar a los bebés de no exponerlos a los parlantes ni dejarlos al lado, así como se los protege del calor, del frío, del hambre, se los debe proteger del ruido ese oído en formación”, recomendó seriamente.

La moda de colocar parlantes gigantes en los autos y probarlos al máximo es una aberración medica tremenda, no solo por el oído sino por la seguridad en las calles. Eso te aturde tanto que deberían estar prohibidos, las calles vibran, es tremendamente dañino para la salud de todos los que se exponen a esos ruidos, el daño es irreversible y pareciera que nadie se da cuenta. A nosotros nos compete dar el consejo, las consecuencias son para ellos, es como la vacuna contra el covid, tenés las herramientas para estar mejor, queda en cada uno tomarlas o ignorarlas”.

Finalmente para cerrar la charla de concientización, Aldonate recomendó cuidar la voz tanto como el oído: “Hoy en día el mundo tiene dos grandes problemas que son la audición y la voz, todo relacionado a los ambientes laborales actuales. No hay un sentido más importante que otro, se torna importante cuando te falta, las maestras por ejemplo la mayoría tiene un gran daño en la voz. Siempre tenés que tomar en cuenta qué hacés de tu vida, donde trabajas, y cómo prevenir los daños y cuidarnos de los ruidos”, cerró.