Como pedo de buzo: continúa la suba de precios de los alimentos
Un informe advierte que la suba de alimentos persiste en marzo y el índice de inflación podría superar al 2,4% de febrero. De esta manera, la economía hilvanaría seis meses consecutivos por sobre el 2% mensual. Cuáles fueron los productos que más aumentaron.

El impulso que tomaron los precios de los alimentos desde febrero parece ponerle un piso alto a la inflación de este mes, que para algunas consultoras ya asoma levemente por encima del 2,4% que había registrado el mes anterior, de acuerdo a una nota publicada por el periodista Mariano Boettner este lunes en Infobae.
Según dejan entrever los datos de subas de precios semanales de alimentos y bebidas que desarrollan un grupo de consultoras, el indicador para la inflación general de marzo podría rondar el 2,5% y así la inflación completaría seis meses consecutivos por encima del 2%, piso que se erige como difícil de perforar.
Marzo sería el segundo mes completo de crawling peg del tipo de cambio oficial a ritmo de 1%, una medida con la que el Gobierno buscaba que los bienes converjan hacia ese ritmo nominal. En febrero, por lo pronto, crecieron a ritmo de 2,1 por ciento. El efecto de esa medida cambiaria fue más claro en el índice mayorista, que en el segmento de productos importados tuvo un aumento de 0,5 por ciento.
Por lo pronto, el índice general de precios tendría otro mes de leve aceleración. Para Analytica, “durante la tercera semana de marzo registramos una variación semanal del 0,9% en los precios de alimentos y bebidas de Gran Buenos Aires. De esta forma, el promedio de cuatro semanas es de 3,4%”, indicó un informe reciente. “Para el nivel general de precios proyectamos una suba mensual del 2,5% durante marzo”, fue la conclusión.
Por otra parte, hicieron un análisis por rubros: “El mayor aumento en el promedio de las últimas cuatro semanas se dio en verduras (+9,9%) y carnes y derivados (+5,2 por ciento). Entre las categorías con menores aumentos se encuentran otros alimentos (+0,9%) que incluyen snack, salsas, etc. y aceites, grasas y mantecas (+0,9 por ciento). Por otro lado, se registraron reducciones en los precios de café, té, yerba y cacao (-0,4%)”, fue el detalle.
El aumento en la carne fue determinante en febrero y podría serlo también en marzo explicado por el peso que el Indec le otorga a ese rubro en la conformación de la canasta que mide los precios de manera mensual. Para el caso del Gran Buenos Aires, carnes explica casi el 7% del total, aunque en otras regiones explica incluso una proporción mayor, como en el Noreste (13,2%) y Noroeste (12,5 por ciento). Así, en febrero se observó en el Gran Buenos Aires un aumento de 7,6% en carnes, con cortes que llegaron a tener una suba superior al 13 por ciento ese mes.
Por su parte, LCG mencionó en su propio reporte semanal que “luego de una suba prácticamente nula la semana anterior, la tercera semana de marzo mostró una importante aceleración de la inflación de alimentos y bebidas”. En ese sentido, la consultora remarcó que “el aumento fue del 2,4% semanal impulsado por carnes, bebidas y lácteos. De este modo, la inflación acumulada en las últimas 4 semanas trepó a 3,4%, consolidándose un escalón más alto que los meses previos”.
Por su lado, Equilibra, que también elabora un índice semanal de alimentos y bebidas, indicó que en la tercera semana de marzo hubo una suba de 0,5% en ese rubro y que, de esta manera, el IPC es proyectado en 2,5 por ciento. “Otra semana con fuertes subas del rubro Carnes (2,4%) por alza de carne vacuna y pollo (+2,4% y 3,1%, respectivamente), que llevaron a Alimentos y bebidas (1,0%) liderar la inflación semanal”, resumió esa consultora en sus redes sociales.
En su sexto mes, perforar el 2% mensual se volvió un objetivo escurridizo, como lo había sido el del 4%, entre mayo y agosto. Algunos economistas y consultoras ya advertían, en las últimas semanas, que el ritmo de precios podría tener una nueva fase inercial. “El tránsito hacia una inflación menor al 2% demorará por lo menos hasta mayo próximo, algo que anticipan los propios analistas del REM del BCRA y que los funcionarios del Gobierno comienzan a reconocer públicamente”, aseveró un informe de Suramericana Visión.