El sueño de la casa propia: San Martín y la historia de su primera cancha
El Santo tardó más de 20 años en llegar a La Ciudadela, antes había hecho de local en varios campos prestados, hasta en 1924 logró tener su primer estadio propio. Acá te contamos cómo era.

(Foto: gentileza Ramiro Villa)
San Martín y Ciudadela son sinónimos: el barrio y el club se han ido retroalimentando el uno del otro de tal manera que parecen no se puede nombrar a uno sin pensar en el otro, porque al fin y al cabo son lo mismo.
Sin embargo, hubo un tiempo donde San Martín estuvo instalado con casa/cancha propia en otro lado, más precisamente en Barrio Sur.
Se sabe que el Santo fue fundado justamente a escasos metros de la Plaza San Martín a la cual le debe su nombre, el 2 de noviembre del 1909, sin embargo tras peregrinar por distintos gimnasios de la ciudad, tardó casi 15 años en conseguir su primer lugar en el mundo.
Fue exactamente hace 98 años, el 6 de julio de 1924, cuando se inauguró el primer estadio propio de San Martín.
Se trataba de la manzana comprendida por las calles Bolívar, Rondeau, La Rioja y Alberdi, a pocas cuadras de donde el club había sido fundado.
La adquisición del inmueble se produjo el 23 de marzo del año 1923 y contaba con un chalet de varias habitaciones y una quinta con árboles frutales.
En ese espacio se armó el campo de juego de fútbol, cuatro canchas de tenis, una pista de ciclismo y una cancha de básquet.
En el chalet que se ubicaba en la esquina de Bolívar y Alberdi, se instaló la Secretaría del Club, un gimnasio, vestuarios, baños y el buffet.
Alrededor del campo de juego se instalaron dos tribunas: una popular en uno de los laterales que contaba con unos 10 escalones y del otro lado un grada oficial provisorio de madera que iba a ser reemplazada por otra de cemento de 40 metros y unos 28 escalones que jamás llegó a construirse.
El partido inaugural lo disputaron San Martín y River Plate que venía por tercera vez en su historia a nuestra provincia. Los porteños se impusieron por la mínima diferencia.
En total, aquella primera cancha fue escenario de 54 partidos de San Martín en casi seis años: 19 fueron triunfos, 22 empates y 23 derrotas.
El último encuentro se disputó el 13 de abril de 1930 por el torneo anual: el Santo venció 3 a 0 a Bomberos Fútbol Club, actual Tucumán Central.
Un mes después, asediado por la crisis económica que por entonces era global tras la caída de la bolsa del 29, San Martín se vio obligado a vender el inmueble.
Luego, esa manzana fue atravesada por el actual Pasaje Grimau y Gálvez y se vendió en distintos lotes, lo que le permitió al Club recuperarse en lo financiero.
Dos años después, tras deambular por varios gimnasios públicos, de la mano de los Ingenieros Mario Bron y Bathaburu, el Santo adquirió los terrenos de La Ciudadela donde construyó su segundo estadio que hasta hoy mantiene y del que probablemente nunca se irá.
????El campo de deportes santo contaba con: tela metálica de 1.20, pista para pruebas ciclistas????♂️, 100 metros de tribunas populares de 10 gradas, tribuna oficial provisoria para 2000 personas, un chalet???? social donde funcionaba la secretaría, gimnasio, vestuarios, baños y buffet.
— Ramiro Villa Leal (@RamiroVillaLeal) July 6, 2022
➡️El cerco de cemento armado de 280 metros abarca las tres cuartas partes de las calles La Rioja, Bolívar y Rondeau; estando el resto del campo cercado con alambre tejido. Una hermosa quinta de naranjos rodea el chalet, dando al conjunto un bonito golpe de vista.
— Ramiro Villa Leal (@RamiroVillaLeal) July 6, 2022
???? El Orden decía: "Tales son las instalaciones que inaugura mañana el club #SanMartín, después de haber realizado sus autoridades activas y empeñosas gestiones para dotar a la ciudade de un nuevo sitio de esparcimiento para la juventud tucumana cuyas predilecciones (+)
— Ramiro Villa Leal (@RamiroVillaLeal) July 6, 2022
se vea pronto completada con las instalaciones restantes.
— Ramiro Villa Leal (@RamiroVillaLeal) July 6, 2022
Para inaugurar el campo de deportes ????, el Club #SanMartín ja invitado a #RiverPlate, la poderosa institución porteña, que es hoy por hoy una de las más importantes de Sud América.