"Hasta las lágrimas": Sportivo Guzmán, la emoción en Villa 9 de Julio y el hecho histórico que celebra el fútbol tucumano
El Juliano, uno de los gigantes de nuestra provincia, cumplirá su sueño este viernes a la noche. La palabra del presidente Gustavo Loreto y un momento para atesorar toda la vida. VIDEO

Los Julianos están de fiesta. Fotos: Sportivo Guzmán Oficial.
Si los ángeles anuncian con trompetas la llegada de sucesos importantes, cómo este viernes el glorioso Sapo Díaz no va a estar sacándole brillo a la trompeta que le legó la familia Bellomio.
Junto a la luna que este viernes 25 de abril iluminará el cielo de Villa 9 de Julio, el hincha más importante del fútbol tucumano tocará desde arriba por primera vez de noche. No solo la luna alumbrará al estadio Humberto Rizza: las luces se encenderán para el primer partido de noche que jugará en su historia Sportivo Guzmán, el club que tantas tardes llenó de orgullo al fútbol tucumano.
“Este viernes, a las 20.30, nuestro querido Sportivo Guzmán jugará por primera vez un partido a la noche. Estoy feliz y emocionado por este hecho histórico y único en la historia de nuestro club”, se emociona el presidente Gustavo Loreto en una entrevista con Juan José Márquez, periodista tucumano y Juliano hasta la hernia.
“Sportivo Guzmán es pasión, es villa, es acompañamiento, es sacrificio y es esfuerzo. La gestión anterior dejó la vara muy alta y ahora poder contar con un sistema de iluminación propio en el estadio es un sueño cumplido”, se sincera el presidente actual, quien heredó el mando del enorme Enrique Chamorro, campeón como jugador, técnico y presidente de los Julianos.
Nacido justamente una noche de viernes el 15 de abril de 1921, en la esquina de Luis F. Nougués y Pasaje 1° de Mayo, Sportivo Guzmán siempre ha sido Pueblo.
Al compás de la Matilde Pastrana y del Sapo de las trompetas por quien se celebra El Día del Hincha tucumano cada 29 de agosto, a Sportivo le faltaba algo. Al primer equipo tucumano en jugar un Nacional (1967), al clásico barrial de Atlético, a la fiesta que se vive los sábados a la tarde con La Serrucho le faltaba lo que va a suceder este viernes a la noche contra Ateneo, el invitado de lujo a la fiesta del barrio más popular de la provincia junto a Ciudadela. Al club que lleva el nombre del gran Alfredo Guzmán le faltaba jugar un partido de fútbol a la noche en su casa, en su barrio, con su gente, un viernes a la noche, con todo lo que significa ir a la cancha un viernes a la noche en Tucumán.
“Estábamos probando las luces, los chicos de la Primera estaban entrenando de noche para poder prepararse para lo que significa jugar de noche, y en ese momento apareció un socio del club, un hombre mayor de 79 años que se emocionó hasta las lágrimas. Nunca había visto el club así”, le cuenta el presidente Loreto a los colegas de Más Deportes.
“Nuestro objetivo es crecer con humildad. Nuestro presupuesto es bastante acotado. Somos un club que no recibe un subsidio de nadie, pero entre sponsors, hinchas, rifas y colaboraciones logramos que no se nos fuera ningún jugador, mantener la base, y también que nuestra gente, los empleados del club, perciban su salario”, destaca Loreto, nieto del popular Viejo Luna, masajista histórico del club.
Si de manos milagrosas como las del Viejo Luna hablamos, la Virgen del Carmen y su manto sagrado han marcado el aura de un barrio que este viernes a la noche volverá a creer que bellos milagros sucederán.
Es un sueño que se materializa con los que apoyan ese sueño: “¿Puedo nombrar a los sponsors, JJ?”, consulta, humilde, el presidente. Y, ante el visto bueno del conductor, los nombra: “La Campechana, Transportes Durga, vidriería Ordoñez, helados Copito, Mundo Cel, Los Paisanitos, Matías Ávila como pieza fundamental, gaseosas Secco e Ingeco”.
Que se enciendan las luces por primera vez en la cancha de Sportivo este viernes a la noche tiene un significado cargado de simbolismo en un barrio castigado por lo que pasa cuando el día se esconde.
Que se enciendan las luces permite alumbrar un trabajo silencioso que se realiza en otras áreas y que tienen como principal objetivo justamente la razón primera de los clubes en la Argentina: la contención de los niños, el sueño de los jóvenes y la razón de los días para los viejos.
“Para mí Sportivo es el mejor club del mundo y todo lo que hacemos es para el hincha Juliano que está constantemente apoyando. El club tiene que estar para la contención: desde los más pequeños hasta los más grandes. El básquet femenino ha salido campeón, el básquet masculino bicampeón, hay clases de zumba, hay una estructura. Y la armamos con humildad”.
Todos estamos invitados este viernes a la noche. Las canciones de Doña Nina Íñigo y su megáfono volverán a retumbar junto a las trompetas del Sapo. La camiseta marcada por el rojo y blanco volverá a transpirarse como lo hizo David Íñigo, "el tucumano que jugó en San Lorenzo de Almagro, en Los Gauchos de Boedo porque eran todos changos del interior menos el Nene Sanfilippo", tal como recuerda Juan José Márquez, colega del famoso Wally Medina, periodista y Juliano como el barrio que lleva tatuado el día que se declaró la Independencia de la Argentina aquí, en Tucumán, nada más y nada menos.
“Que sea una fiesta y si es con un triunfo, mejor”, cierra el presidente Gustavo Loreto, con la voz quebrada de la emoción. Una voz conmovida, pero lista para cantar esta noche el himno: “Nosotros somos los Julianos desde el Puerto Nuevo, el primer campeón tucumano y padre de los Cuervos, la hinchada del Sapo Díaz te sigue alentando, en las buenas y las malas yo te sigo a todos lados, nací en Villa 9 de Julio a orillas de un rancho, mi cuna fue roja y blanca ya era Juliano, desde pendejo te quiero aunque ganes o pierdas, vos sos la felicidad, la razón de mi existencia… Te quiero, Juliano, te quiero… Te quiero, Juliano, te quiero…”.
"La unión hace la fuerza": la felicidad de Sportivo Guzmán es la del fútbol tucumano.
El Sapo Díaz sonríe desde el cielo. Este viernes a la noche volverá a sonar su trompeta.